¿Por qué vuelan los aviones?

Hace unos 15 días me tocó viajar a Valencia por motivos laborales. Hacía ya tiempo que no montaba en avión. La verdad es que, a pesar de los emocionantes aterrizajes que solemos tener en Bilbao, no soy de los que le tiene miedo a volar sino más bien de los que, bien en el despegue o bien en el aterrizaje, se quedan absortos contemplando los paisajes y sobre todo admirando la capacidad del hombre para rozar lo imposible. Y es que lograr que un coche se autopropulse por la tierra pudo ser difícil, pero ¿conseguir que un aparato del tamaño de un avión sea capaz de volar? ¿que alcance los 9.000 o 10.000 metros de altura y los 800 o 900 km/h? No sé vosotros, pero yo lo pienso y todavía me parece increíble. Y cuando pienso en las leyes físicas que lo hacen posible, creo que todavía me parece más apasionante.

Para resumir podríamos decir que los aviones -con el fin de volar- se basan fundamentalmente en dos teorías: por un lado en el efecto Venturi y por otro, y de forma más importante, en la 3ª Ley de Newton, también conocida como "Ley de acción y reacción".

El efecto Venturi -basado en el principio de Bernoulli- consiste en que cuando un fluido aumenta su velocidad, disminuye su presión. Para aprovecharlo, las alas de los aviones están diseñadas de tal forma que la parte superior del ala es más curva que la parte inferior, haciendo así que la distancia a recorrer por el aire sea mayor en la zona superior y que por tanto este aire se vea obligado a aumentar su velocidad. Esto hace, debido al efecto Venturi, que la presión disminuya por encima del ala (a mayor velocidad, menor presión). En definitiva, se consigue que la parte inferior del ala tenga una mayor presión que la parte superior y esto ejerce un empuje hacia arriba que ayuda al avión a mantenerse en el aire.


Sin embargo, la fuerza ejercida por el efecto Venturi no es suficiente por si misma para conseguir la sustentación del avión en el aire, sino que ésta se debe en mayor medida a la citada 3ª Ley de Newton -Ley de acción y reacción- que establece que ante una determinada fuerza o acción producida sobre un objeto, éste genera a su vez una reacción de igual intensidad pero en sentido contrario (es decir, si somos tan cafres de darle un puñetazo a una pared, dicha pared ejercerá sobre nuestro puño una fuerza de igual magnitud pero en sentido contrario). 

¿Y cómo se emplea esta teoría en los aviones? Pues de nuevo gracias a la forma y la posición de las alas. Estas se diseñan de tal forma que el aire que pase por ellas sea propulsado hacia abajo, generando así sobre dicho aire una fuerza de acción en sentido descendente que, debido a la citada ley de Newton, da lugar a una fuerza de reacción sobre el ala en sentido ascendente. Por supuesto, y al igual que antes con Bernoulli, a mayor rapidez se consigue una mayor fuerza, y por ello los aviones necesitan alcanzar una altísima velocidad primero para despegar y posteriormente para mantenerse en el aire.


Un ejemplo habitual de este efecto lo habréis experimentado muchos al viajar en coche y sacar la mano por la ventanilla. En ese caso, si en vez de ponerla de perfil, inclinamos un poco la mano enfrentándola al viento, estaremos desplazando el aire hacia abajo y notaremos una fuerza ascendente que tiende a levantar nuestra mano.

Esta 3ª Ley de Newton se ve además ayudada por el denominado efecto Coanda que es un fenómeno físico por el cual un fluido tiende a adherirse y seguir la trayectoria de un objeto con el que incide. En el caso de los aviones, el aire (fluido) tiende a pegarse al ala del avión (objeto con el que incide) y a seguir la trayectoria de esta (es decir, seguir un sentido descendente). Podéis ver un ejemplo práctico en la foto, donde una corriente de agua incide en una cuchara, o bien en el siguiente vídeo:


Así que ya sabéis, resumiendo, la respuesta a la pregunta del título de la entrada es:
Efecto Venturi + 3ª Ley de Newton + Efecto Coanda


"Los Asesinos del Emperador" (Santiago Posteguillo)

Como ya sabemos, en innumerables ocasiones la realidad es capaz de superar ampliamente a la ficción. Muchas veces la literatura o el cine se empeñan en idear nuevas tramas y nuevos mundos, nuevas batallas y nuevas civilizaciones, o nuevos personajes y nuevos actos heroicos para conseguir una buena historia cinematográfica o literaria. En muchas ocasiones lo logran, pero en muchas otras no. Y es en estas últimas cuando nos terminamos acordando de la realidad. ¿Para qué tanto imaginar si en la realidad ya tenemos historias apasionantes que superan esto? Yo más de una vez me he encontrado preguntándome ¿por qué, en vez de esta mierda de película, no hacen una megaproducción sobre… (y aquí que cada uno ponga a su personaje histórico favorito)?

Sea como sea, Santiago Posteguillo es sin duda uno de los que han sabido aprovechar muy bien la realidad ya existente. Hace dos o tres años ya nos descubrió la apasionante historia de Publico Cornelio Escipión, el Africano, con su magistral trilogía: "Africanus, el hijo del Cónsul", "Las Legiones Malditas" y "La Traición de Roma", y ya entonces pensé: ¿Para qué idear nuevas batallas teniendo las de Cannae y las de Zama? ¿Para qué pensar en nuevos choques de civilizaciones si ya tuvimos el increíble enfrentamiento Roma-Cartago? ¿Para qué crear nuevos villanos si es imposible mejorar a Aníbal Barca? ¿Para qué nuevos héroes si ya existió el gran Escipión?

Ahora, en "Los Asesinos del Emperador", basándose una vez más en la realidad pasada, Posteguillo nos revela a un nuevo gran personaje de la antigua Roma, y de toda la Historia en general, a Marco Ulpio Trajano. Un gran estratega, que admiraba a Julio César y a Escipión, y que si bien no pudo conseguir tanto éxito militar como estos, sí logró vencer en grandes batallas, sacar adelante las más difíciles misiones  al mando de sus legiones, y llegar finalmente a convertirse en el primer emperador hispano del Imperio Romano.

En paralelo a la emocionante vida de Trajano, el escritor español aprovecha su último libro para situarnos en una época enormemente convulsa del Imperio Romano, caracterizada por diversas guerras civiles y que concluye con el asesinato, en su propia cámara, del entonces emperador Domiciano. Batallas, conquistas, asesinatos, traiciones e Historia, mucha Historia. En conjunto una obra completísima, casi a la altura de la citada trilogía, que pone de relieve a determinados personajes de la antigua Roma que, al igual que sucede con Escipión, la cultura popular tal vez no haya tratado como se merecen.

"Y silbaron tres balas" de Andoni Iribarren

Lorenzo Paluzza es un actor en horas bajas. Después de alcanzar el éxito durante los mejores años de su carrera, se encuentra ahora ante la última oportunidad de volver a ser alguien en el mundo del cine. Un nuevo productor le ofrece la posibilidad de interpretar otra vez a aquel personaje del western que tanta fama le dio. Sin embargo el rodaje se complica y el pasado de Lorenzo irrumpirá de nuevo en su vida. Una trama plagada de venganza, pasión, acción y sexo.


Este es el argumento de "Y silbaron tres balas", del escritor bilbaíno Andoni Iribarren. Un libro muy fácil de leer, con una narrativa fresca y entretenida, y un argumento interesante y sorprendente hasta la última página.

Además, en un alarde de innovación, que tanto me gusta honrar aquí en el blog, Iribarren ha publicado su novela en la plataforma Bubok, en formato e-book y al más que competitivo precio de 1 €. Enhorabuena al autor por la novela y por la iniciativa, y desearle desde aquí mucha suerte con futuras novelas.

La Mecánica del Caracol

Como un oasis en el desierto. No es una expresión muy original, pero es la que se me viene a la cabeza cuando pienso en ellos. Dos programas de radio y televisión que merecen realmente la pena. La verdad es que en la radio quizá existan más excepciones, y haya más programas culturales y de calidad, pero lo de la televisión me da la sensación de que es para echarse a temblar.

El programa de televisión al que me refiero, ya lo comenté aquí en el blog hace casi un año. Se trata de "Escépticos", del que por aquel entonces emitió ETB2 su episodio piloto "¿Fuimos a la luna?" con un rotundo éxito. Ahora está inmerso ya en la emisión normal de un capítulo por semana, y aunque el dinamismo y el atractivo de los capítulos no sea el mismo que el conseguido en el piloto, la temática y el objetivo del programa no ha cambiado: divulgar el método científico al gran público y desenmascarar falsos mitos, creencias y conspiranoias. La cadena pública lo ha arrinconado un poco en la parrilla (Jueves 00:00h aprox.) pero con la web de "ETB a la carta" se puede acceder a todos los episodios, incluso antes de que se emitan en televisión.


En cuanto al programa de radio, lo he descubierto hace no mucho gracias a los innumerables viajes en coche por motivos laborales. Se trata de "La Mecánica del Caracol" y se emite en Radio Euskadi de Lunes a Viernes, de 15.00h a 16.30h. Los temas que tratan son básicamente científicos, históricos y en general culturales. Lo conduce magistralmente Eva Caballero, quien con voz dulce y personalidad tranquila y sosegada, es capaz de transmitir al oyente su afán por el conocimiento cultural y su divulgación. Una joya que aconsejo a todos aquellos que disfrutéis aprendiendo más sobre estos temas. Para lo que no podáis escuchar el programa en su emisión normal, la web del mismo los tiene disponibles para descargar o escuchar en streaming, y además pueden encontrarse también como podcasts en iTunes:


Enhorabuena y gracias al grupo EITB por estos dos magníficos ejemplos de buen gusto y propósito educativo. Y enhorabuena y gracias también por ampliar estos contenidos a las nuevas tecnologías.

Maratón de Juego de Tronos

Aunque haya pasado ya tiempo y hasta ahora no lo haya comentado aquí, al final la hicimos. Me refiero al maratón friki de "Juego de Tronos". Los 10 capítulos seguidos. Bueno, la verdad es que hicimos una parada para comer en Desembarco del Rey y otra para refrescar el gaznate a orillas del Tridente, pero podemos decir que los vimos seguidos, y que comparándola con la anterior maratón de "El Señor de los Anillos" se nos pasó mucho más rápido.


En general creo que nos gustó a todos, aunque cada uno echó en falta alguna cosa. Hubo quien se quejó de la falta de batallas y quien criticó el exceso de sexo explícito (¿¡quien se puede quejar de esto!?). Personalmente creo que la historia está bien contada y bien adaptada, y que no cambia cosas relevantes respecto a la novela. Y además consigue algo muy importante: meterte mucho en la historia y engancharte, igual que los libros. Bueno, igual no, pero casi. Y ahora solo voy a ponerle una pega: creo que flojea un poco en los actores elegidos para determinados personajes. No me gustó Tyrion a quien me imaginaba más desfigurado, ni Catelyn a quien hacía más atractiva, ni Jon Nieve que me pareció demasiado desaseado y andrajoso. Y ni mucho menos Loras Tyrell, el Caballero de las Flores ¡qué decepción por Dios! Y no es que los actores trabajen mal, sino que estéticamente me los había imaginado de otra forma. Pero bueno, con otros personajes, como por ejemplo Ned Stark, o Tywin y Jaime Lannister, creo que lo han clavado.

¿Y qué más puedo decir? Pues no sé. Que está muy bien y que merece la pena verla. Y que como los libros -o casi otra vez- te deja totalmente con las ganas de empezar la segunda parte. Hasta que salga, o hasta que me ponga con la quinta novela de la saga: "A Dance with Dragons", es posible que pase tiempo, así que de momento he matado el gusanillo con el cómic "El Caballero Errante" del cual ya hablaremos.

Por cierto, que ya iba siendo hora de que escribiera esta entrada ¿no? ¡Que ya está bien lo mío!

La ventana pintada - Jose Carlos Somoza

Lo terminé pero no me gustó. Lo terminé porque me lo dejó prestado un amigo y parece que eso te fuerza un poco más a aguantar. Y lo terminé también porque tenía la esperanza de que la historia diese un giro, que el autor se sacase algo de la manga, pero al final me quedé con esa esperanza hasta la última página. La verdad es que la trama tenía buena pinta, como muchas de las novelas que al final no te acaban convenciendo la verdad, pero pintaba bien: el mundo de los aficionados al cine, mezclado con personalidades obsesivas y desquiciadas psicológicamente… Pero al final la mezcla se me hizo muy rara, un poco sinsentido, y lo que es peor: terminé el libro, pero es como si no hubiese habido nada, como si el autor no me hubiese contado nada. Como si no hubiese habido historia que contar.

Cuando mi amigo me preguntó qué me había parecido le dije que bien, que estaba bien. No sé porqué, supongo que porque me lo dejó con ilusión y no quería desilusionarle. Pero sé que mi cara me delató y sé que él sabe qué significa esa cara –es lo que tiene una amistad de muchos años-, así que sabe de sobra que no me convenció. En fin, que él se ha puesto ya con otro de Somoza, "El Cebo", pero yo creo que no repetiré. Aunque la verdad es que me ha resumido la trama y me ha picado la curiosidad: un atentado terrorista, un futuro desolador, tintes de ciencia-ficción… no sé, igual es que yo me emociono rápido o que esto también me lo ha contado con mucha ilusión. Sinceramente no creo que repita, pero bueno, ya veremos. A veces caigo fácil. Si lo habéis leído, ya me contaréis, pero sin ponerle mucha ilusión por favor, que entonces estoy perdido.

X Salón del Cómic de Getxo

Un año más, llegados lo últimos días de Noviembre, Getxo celebra durante todo un fin de semana su Salón del Cómic. En este caso se trata ya de la X edición. La localización la Plaza de la Estación de Las Arenas, y el horario 11.00-14.30 por las mañanas y 17.00-21.00 por las tardes.

Además de las habituales casetas de las editoriales y las tiendas, con sus ofertas y novedades, las exposiciones que habrá este año en la carpa son:
  • DIEZ AÑOS DE ASTIBERRI 
  • BULLES JAZZ BLUES: EL CÓMIC EN CLAVE DE SWING 
  • LA CÚPULA - EL VÍBORA 
  • CONCURSO DE CÓMIC DE PORTUGALETE: 25 AÑOS

Como autores invitados, cabe destacar la presencia de Paco Roca, autor español de moda y de quien un servidor tiene muy buena opinión después de leer su cómic "Arrugas", que ya comenté por aquí en su día.

Para más información acerca del Salón del Cómic de Getxo podéis acudir a su página web:

Salón del Cómic y Manga de Getxo

Ósmosis y sandwiches

Tocaba partida de poker. Soy malísimo, pero lo poco que he jugado me ha gustado. De todas formas da igual, era una buena excusa para juntarnos, charlar y cenar. Hay quien iba a llevar tortilla, otro un poco de embutido… ¿Y yo? Pues decidí hacer unos sándwiches caseros. Lleva su tiempo de elaboración, no os creáis… Bueno, el caso es que me puse a hacer los sándwiches y a cocer un par de huevos. Y recordé que hace ya mucho tiempo, haciendo estos mismos sándwiches con mi padre, fue cuando aprendí lo que era la ósmosis. "¿Papá, por qué le echas sal al agua para cocer los huevos?""Para que no se les rompa la cáscara hijo, por la ósmosis". Y a esto siguió la correspondiente explicación, seguro que mucho mejor que la que voy a poner yo aquí ahora.

La ósmosis se define en la RAE como:

"Paso de disolvente, pero no de soluto, entre dos disoluciones de distinta concentración separadas por una membrana semipermeable."

Lo que puede traducirse en que: cuando dos líquidos (agua, disoluciones...) están separadas por una membrana semipermeable (pieles, cáscaras...) y uno de los líquidos tiene mayor concentración que el otro de alguna sustancia (sales, azúcares...), se produce un fenómeno de trasvase de líquido, pero no de la sustancia disuelta, desde la zona de menor concentración hacia la zona más concentrada tratando de igualar las dos concentraciones.


Llevado al ejemplo del huevo: al estar el agua de la cazuela y el interior del huevo separados por la cáscara de este, y poseer el interior del huevo mayor concentración salina, se produce un paso de las moléculas del agua (que tiene menor concentración) hacia dentro del huevo, haciendo que este se hinche incluso llegando a veces a romper la cáscara.

¿Qué conseguimos por tanto al echar sal al agua donde vamos a cocer los huevos? Pues logramos que las soluciones (agua e interior del huevo) estén más igualadas en cuanto a concentración salina y por tanto que no se produzca este proceso de ósmosis. E incluso podemos conseguir el efecto contrario, es decir: si echamos mucha sal al agua de la cazuela, esta será ahora la que tenga mayor concentración salina y el traspaso de líquido se producirá desde el interior del huevo hacia el exterior, pudiendo observar, después de pelar el huevo, que este se queda en un tamaño mucho más reducido.

El hecho de que a través de la membrana (ej: cáscara del huevo) pase únicamente el agua y no las sustancias disueltas, se debe a que el tamaño de las moléculas del agua es más pequeño que el de las moléculas de dichas sustancias y son capaces de pasar por los minúsculos poros de la membrana. No así las moléculas de las sustancias disueltas, que al ser más grandes, no pasan y quedan concentradas en esa parte de la membrana.

Además de para este experimento casero, los procesos de ósmosis (y más concretamente la ósmosis inversa) suelen utilizarse por ejemplo en la industria para obtener concentrados alimenticios, de zumos, de azúcares o incluso para potabilizar agua, separando del agua las sales, y posibles toxinas o contaminantes. Otra curiosa aplicación, que vemos en el día a día, es la conservación en vinagre de los encurtidos (pepinillos, cebolletas…). Estos, al estar conservados en un líquido con alta concentración en vinagre, pierden por ósmosis parte de su agua interior, y evitan así que determinadas bacterias se desarrollen, consiguiendo que el alimento pueda conservarse por más tiempo.

Por cierto que la receta del sándwich, además de huevo cocido, lleva jamón de york y lechuga, todo muy bien picadito, y mayonesa. Pero el mayor secreto de todos es… ¡cortar los bordes del pan bimbo! ¡Imprescindible!

"Realidad Aumentada" de Bruno Nievas


Es realmente difícil encontrar buenas novelas actuales de ciencia-ficción. Algunas hay claro, como por ejemplo la trilogía "Paralaje Neanderthal" de Robert J. Sawyer o la sorprendente "Leyes de Mercado" de Richard Morgan, pero hasta que das con una buena, hay que chuparse bastantes novelas flojillas.


Hace unos días me puse con "Realidad Aumentada" de Bruno Nievas. Tenía ganas, me gustaba la temática e incluso empezó bien, pero al final la tuve que dejar a la mitad. La trama se centra en un ingeniero informático, y a la vez neurólogo, muy destacado profesionalmente a nivel mundial, y que es reclutado para un proyecto secreto cuyo objetivo es desarrollar un revolucionario sistema de realidad aumentada (algo así como las aplicaciones de los móviles que al activar la cámara te sacan información de los sitios en tiempo real, pero mucho más avanzado). El proyecto, que ya de por sí empieza de una forma un poco extraña, comienza a tomar tintes trágicos cuando se suceden las misteriosas muertes de varios colaboradores.

No sé mucho más porque, como digo, no conseguí continuar. Así que no sé en qué quedaron finalmente esas muertes ni cómo acabó el proyecto. Por un parte creo que la trama principal está bien pero al final no me acabó de enganchar. Las explicaciones tecnológicas o científicas parece que están sobredimensionadas, es decir, parece que el autor les da mucho bombo intentando hacerlas más complicadas de lo que realmente son y eso al final cansa, hace más tediosa la lectura y finalmente desilusiona cuando por fin descubres que a lo que se estaba refiriendo era algo mucho más simple. Por otro lado, a lo largo de la trama principal hay una relación sentimental de amor-odio metida un poco con calzador, que parece que no pega y que tiene unos vaivenes muy extraños que no logré comprender (¡pero bueno, a ella le mola él o a él le mola ella o qué pasa aquí!). En resumen, buena idea inicial pero llevada de una forma un poco floja.

Para ser justos, y ahora ya independientemente de la calidad de la novela, a favor de Bruno Nievas y de su "Realidad Aumentada" hay que destacar un punto muy importante a la vez que innovador. El autor comenzó publicando su novela solo en formato electrónico y de forma gratuita (uniéndose a la plataforma "1 Libro, 1 Euro" que ya comentamos aquí en el blog), y no ha sido hasta bastante tiempo después, y gracias al éxito que ha conseguido, cuando ha lanzado la publicación de la novela en papel, la cual, en otro alarde de progreso, se distribuye con el libro también en formato electrónico y sin la tecnología de derechos DRM para poder así intercambiarla libremente. En ese sentido: chapó!!

Fringe

El "maratón friki" lo tenemos programado realmente para el sábado que viene: los 10 capítulos seguidos de "Juego de Tronos" en un mismo día (ya hablaremos de ello cuando toque), pero antes, como para todo maratón, hay que hacer un entrenamiento previo. Y menudos entrenamientos estamos haciendo desde que volvimos de vacaciones. Sesiones de 4, 5 y hasta 6 capítulos, alternadas con otras de 1-2. Y es que casi no podemos parar. Cada vez que terminamos un capítulo no pasan más de 2 segundos hasta que uno de los dos dice: "Ponemos otros ¿no?", y al terminar el siguiente: "¡Otro, eh!?" y luego "¡Pon otro!" y "¡Pon otro!" y "¡Otro!" y "¡OTRO MÁS!". Y finalmente solo nos vence el cansancio del día.

La serie de la que hablo es Fringe, de J.J.Abrams -director de "Perdidos" y "Super 8"- y como quizá no todos la conozcáis, os diré que se trata de una genial serie de ciencia-ficción, en la que una división especial del FBI tendrá que ir resolviendo capítulo a capítulo una serie de casos paranormales o pseudocientíficos: niños que se hacen viejos en menos de 4 horas, hombres eléctricos, cadáveres que sangran plata... Pero lo más interesante es que detrás de todos estos casos, capítulo a capítulo, se va descubriendo una trama de fondo que hacen llamar "El patrón", que parece apuntar a una conspiración científica, y que el FBI tendrá que investigar para determinar quien está detrás de ella y porqué. Para ello, al frente de esa división especial, está la agente Olivia Dunham ayudada por Walter Bishop, un extravagante científico con un pasado ciertamente conflictivo, y su hijo Peter.


Muchos la comparan con la mítica "Expediente X", y sí, creo que puede tener un aire. Pero sinceramente -y ahora alguno me dirá que estoy loco- yo me quedo mil veces antes con Fringe. Creo que es por dos razones: la primera es que los protagonistas son más del estilo que a mí me gusta. Me refiero a que los personajes de Expediente X, Mulder y Scully, quizá estaban más desarrollados emocionalmente, pero los de Fringe (sobre todo la agente Dunham) son personajes que destilan mucha más fuerza, más impulsivos y menos remilgados, es decir, con más cojones. Y el segundo motivo es que, así como en Expediente X, la trama estaba más dirigida a lo paranormal, Fringe intenta acercarse más a la ciencia y al método científico (con las comprensibles licencias al tratarse de una serie de ciencia-ficción) con multitud de guiños y explicaciones a teorías actuales sobre la formación del universo, o incluso corrientes filosóficas.

El último punto a favor para que os animéis con ella y la veáis: es una serie que va claramente de menos a más. Cuando Filos me la recomendó me dijo que cada temporada iba mejorando. Mientras veíamos la segunda pensé que no, que ya no podía ir a más. Ahora que estamos en mitad de la tercera sé que me equivoqué porque estoy más enganchado que nunca. No quiero ni pensar lo que me queda por ver en la cuarta.

Vacaciones en Trafalgar

Unas vacaciones de 10 días en Cádiz dan para más que sol, playa, cerveza y tapas. Para mucho más. Dan por ejemplo para acercarse a la Historia mediante un par de rutas por la parte vieja de la capital gaditana: la "ruta de los castillos y baluartes" y la "ruta de la Constitución de 1812" elegimos nosotros. Aunque igualmente podríamos haber optado por las no menos interesantes "ruta de los cargadores a indias" o la del "recinto medieval y Puertas de Tierra". Y 10 días también dan por ejemplo para hacer deporte y hacer algunas salidas de carrera de 7 Km. desde el final de Caños de Meca hasta el faro de Trafalgar. De forma que gracias a la soledad de la carrera, la tranquilidad del momento y un perfecto amanecer, y metiéndote de nuevo en plena Historia de España, puedes imaginar los cañonazos y abordajes que tuvieron lugar en la famosa Batalla de Trafalgar allá por 1805.

Y cuando ya rodeas el faro, como todavía te quedan los 3,5 Km. de vuelta, puedes aprovechar para saltar de la Historia a la Literatura, y acordarte de que posiblemente quien mejor narró estos acontecimientos fue Benito Pérez Galdós con sus Episodios Nacionales: la célebre batalla, Carlos IV y Fernando VII, Napoleón, la Guerra de Independencia, la Pepa…. Y como no solo de sol, playa, cerveza, tapas, Historia y running vive el hombre, pues acabas decidiendo que en cuanto vuelvas de vacaciones te vas a poner con el primero de dichos Episodios: Trafalgar.

Y así lo hice yo. Y durante los 10 días siguientes a nuestra vuelta de Cádiz me adentré de nuevo en las costas de Trafalgar. Ahora no era yo el que corría claro, sino Gabriel Araceli, el protagonista inventado por Galdós. Bueno, el tampoco corría mucho, más bien aguantaba como podía los embates de la mar, los proyectiles del Victory –nave comandada por Nelson- y el naufragio del Santísima Trinidad. Pero la verdad es que Galdós lo describe tan perfectamente que sí, que yo creo que sí estuve allí de nuevo. Creo que fui yo el que viví la ineptitud de los franceses, encarnada en Villeneuve, y la resignación y rabia de los mandos españoles como Churruca. Y así mis vacaciones se alargaron otros 10 días. Otros 10 días de lectura, de Historia y de vivencias. ¡Y qué digo 10 días, si todavía me quedan 75 años de Episodios Nacionales! Gracias Galdós por concedernos estas largas vacaciones.

Batalla de Trafalgar

"Nueva York" de Edward Rutherfurd


Creo que también pasa por ejemplo con las películas, pero menos. No sé muy bien porqué, pero me da la sensación de que es más propio de las novelas. Quizá por su mayor extensión o quizá por la mayor profundidad de las tramas. No sé, ya os digo que no lo tengo claro. Me refiero a que una novela te consiga enganchar, o no, obedece muchas veces a diferentes circunstancias exteriores: el humor de esos días, las ganas de leer, las preocupaciones laborales, etc. En definitiva, que a veces pillarle el gusto a una novela depende del día que tengas.

Creo que fue el año pasado cuando me puse con la novela “London”, también de Edward Rutherfurd, y no conseguí siquiera llegar a la mitad del libro. Tuve que abandonar porque la historia no acababa de llenarme. Sin embargo recientemente he terminado la novela “Nueva York” y a pesar de ser del mismo autor, tener una temática similar y seguir una misma línea de narración, he acabado encantado con ella, y me ha parecido mucho más absorbente y más entretenida que la anterior. ¡Qué cosas!

En “Nueva York”, al igual que en “London”, el escritor británico narra toda la historia de la -considerada por muchos- capital económica del mundo. Desde su fundación como Nueva Ámsterdam a manos de emigrantes holandeses, hasta los fatídicos atentados del 11 de Septiembre, pasando por muchos de los hitos históricos de la ciudad: su papel en las guerras de la Independencia y de Secesión, el crack bursátil del 1929, la construcción del Empire State, etc. Para poder pasar por todos estos años, la narración se lleva a cabo a través de las generaciones de varias familias neoyorquinas, y a pesar de que esto hace que aparezcan muchos personajes, no se hace nada complicado seguir la trama ni enlazar una generación con las anteriores (creo que de “London” dije todo lo contrario, pero bueno…). Si a todo esto sumamos que la veracidad histórica da la sensación de estar bastante cuidada, se puede decir que en conjunto se trata de una novela muy recomendable, sobre todo para los amantes de la Gran Manzana.

El Empire State dominando el cielo de Nueva York

Breve Historia de Alejandro Magno

Además de su ya conocida y extraordinaria capacidad táctica y estratégica, y de su espectacular valentía y capacidad de liderazgo, Alejandro Magno también destacó por su facilidad para mostrarse bien enormemente magnánimo o bien tremendamente cruel según las situaciones y personajes que se le presentaran.

Un ejemplo de lo primero -entre otros muchos- podría ser sin duda la cálida acogida y la respetuosa hospitalidad que brindó durante largos años a la familia de su máximo rival, Darío III, después de vencerle en la batalla de Issos y de que Darío saliera huyendo por miedo al macedonio, dejando atrás a madre, esposa e hijos.

Batalla de Issos

De su crueldad en determinados casos, hay también varios ejemplos para exponer, pero quizá uno de los más destacados sea la ejecución de Bessos. Con Egipto ya en su poder, y definitivamente derrotado Darío en la famosa batalla de Gaugamela, Alejandro se lanzó hacia el Este, en busca del persa y a la conquista definitiva de Asia. Durante su implacable avance por aquellas tierras, el macedonio halló finalmente al huido Darío en el desierto al sur del mar Caspio. El ejército lo encontró ya moribundo, habiendo sido apuñalado y torturado por los hombres de Bessus, un sátrapa de la provincia de Bactria que ahora se hacía llamar el Gran Rey de Persia.

Alejandro, a pesar de sus desavenencias con Darío, se sintió conmocionado por la desalmada muerte de su archienemigo y tomó la traición de Bessos - además de su osadía por proclamarse Gran Rey- como una afrenta personal. No dejó entonces de perseguirlo hasta que le dio caza y, como no podía ser de otra forma, ordenó su ejecución. Esta se realizó de forma brutal. Después de azotarlo y torturarlo, y de cortarle nariz y orejas, ataron sus 4 extremidades a las ramas flexibles y dobladas de un árbol, de forma que cuando las soltaron el cuerpo de Bessos se partió por la mitad.

Ejecución de Bessos por el ejército de Alejandro

Estos episodios, así como la influencia de sus padres y de sus mentores, sus inicios como general en Grecia, la conquista de Egipto, sus batallas más importantes, su muerte, y en general todas las andanzas de Alejandro Magno, podéis encontrarlas muy bien resumidas y de forma muy entretenida en el libro “Breve Historia de Alejandro Magno” de Charles E. Mercer, con un muy buen prólogo de Juan Antonio Cebrián. Un libro muy agradecido por su fácil lectura y su capacidad didáctica.

La expansión del universo

Buscando información para la entrada anterior, encontré un gráfico muy interesante y muy útil para comprender  el proceso de expansión del universo desde el momento del Big Bang. El tamaño del universo estaría representado por el eje Y el tiempo transcurrido por el eje X.

Como se puede observar, el periodo de Inflación, del que hablábamos en el anterior post, se produjo en los primeros momentos del universo y prácticamente ya alcanzó entonces el tamaño que tiene ahora.

Entre otras curiosidades, se puede ver cómo las primeras estrellas se formaron a los 400.000 años de vida.


Los ecos del Big Bang

La teoría del Big Bang, conocida por todos, es la solución científica más ampliamente aceptada para determinar el origen del universo. Una de las pruebas más importantes para su desarrollo y aceptación fue el descubrimiento de la radiación cósmica de fondo. Esto es, una radiación de microondas que nos llega desde todos los puntos, que afecta a todos los confines del universo, y que proviene de aquel supuesto momento inicial. Pero, independientemente de que una cosa pruebe la otra, una pregunta que personalmente siempre me ha inquietado es ¿cómo puede ser que todavía estemos recibiendo los ecos de dicho Big Bang? ¿cómo es posible que todavía estemos recibiendo radiación del Big Bang si se calcula que este ocurrió hace unos catorce mil millones de años? Y ahora lo pongo en número que impacta más: 14.000.000.000 años!!

Pues bien, según la teoría del Big Bang -combinada con las más recientes teorías de inflación cósmica- en el momento inicial del universo, toda la materia que existe actualmente (incluida la antimateria) se encontraba concentrada en un pequeño punto, que tenía por tanto una densidad y temperatura enorme. En ese momento, aun se desconoce porqué, tuvo lugar una enorme explosión, y el universo comenzó entonces un movimiento de expansión. Durante un tiempo ese movimiento de expansión se realizó a una velocidad superior a la de la luz y por tanto de forma más rápida que la radiación emitida por la explosión inicial del Big Bang. De esta forma, la radiación cósmica de fondo -que viaja a la velocidad de la luz- no pudo alcanzar a todos los lugares del universo (incluidos nosotros) hasta mucho tiempo después, y es por ello que ahora todavía la detectamos.


Pero claro ¿por qué, una vez que nos alcanza, dicha radiación no nos supera y pasa de largo? ¿cómo es posible que la sigamos detectando? Y además ¿por qué nos llega entonces desde todos los puntos y no solo desde donde supuestamente se inició el Big Bang? Pues la respuesta, explicada de forma sencilla (quizá demasiado), es que se puede decir que el Big Bang no fue una sola explosión sino varias. Cada uno de los puntos de materia que existen actualmente (por si es más fácil de entender, y aunque aún no existieran como tal, podéis considerar nuestra Tierra, Marte, o la Vía Láctea o la escala que queráis) estaba representado en aquel pequeño espacio inicial también por un punto. Pues bien, en realidad se puede considerar que lo que se produjo fue una explosión en cada uno de esos puntos de materia, y no una única explosión. De esta forma, todos esos puntos de materia de entonces emitieron una radiación, que es la que nos está llegando todavía ahora de forma constante desde todas la direcciones.

Además, como decíamos, con el movimiento de expansión cada uno de estos puntos se alejaron unos de otros a una velocidad superior a la de la luz, con lo que se distanciaron aún más de nosotros y por tanto haciendo comprensible que la radiación cósmica no nos pase de largo sino que todavía nos continué llegando procedente de los puntos más lejanos, y luego de los aún más lejanos, y luego más y más, etc...

PD: Podéis escuchar una explicación de este fenómeno, mucho más detallada y profesional, en el siguiente podcast de la fantástica página Cienciaes.com - Ciencia para escuchar:

Operación Fuego Mágico

A lo largo de este verano -concretamente el pasado 17 de Julio- se ha cumplido el 75 aniversario del estallido de la Guerra Civil española. Por estas fechas estivales, al inicio del conflicto, una parte importante del ejército sublevado, con Franco a la cabeza, se encontraba destinado en Marruecos y por tanto con la necesidad de cruzar a la península para apoyar a Queipo de Llano y comenzar el avance desde el sur hacia Madrid.

Sin embargo, el ejército republicano dominaba con eficacia las aguas del estrecho de Gibraltar, haciendo imposible la llegada a la península de las tropas nacionales. Entre otras, los historiadores opinan que fue ésta necesidad de cruzar el estrecho la que hizo que Franco tomara la decisión de pedir ayuda a sus afines mandatarios de Italia y Alemania: Benito Mussolini y Adolf Hitler. Finalmente la mayor ayuda llegaría de parte de los germanos, para lo cual Franco hubo de enviar varios representantes a entrevistarse primero con Goebbels, y luego ya directamente con Hitler, quien pese a las reticencias iniciales del primero, acabó aceptando.

Ese mismo día, horas antes de reunirse con los enviados de Franco, y de tomar la decisión de ayudar al general español, Hitler había acudido al teatro a presenciar la ópera de Wagner "La Valquiria" ("Die Walküre"). Su acto final, "Música del Fuego Mágico" debió de dejar tan fascinado al dictador alemán que este decidió bautizar con su nombre a esa operación de apoyo logístico a los sublevados españoles. Desde entonces esta intervención alemana en la Guerra Civil quedaría para la Historia como la "Operación Fuego Mágico".

Aviones de la Legión Cóndor sobrevolando Burgos

Capitán América, la película

Poco a poco se han ido estrenando todas las películas, basadas en comics, que se anunciaban para este año. La última, y quizá también la más esperada, ha sido el "Capitán América: el primer vengador". Fui a verla hace un par de semanas con mi grupo habitual de frikis, y la verdad es que no me defraudó. Entretenimiento y acción sin parar, que era lo que buscaba y esperaba.

Bueno, en realidad también esperaba que el guión se ciñera todo lo posible a la historia original del Capi, o al menos que no la destrozara. Y en ese sentido también quedé bastante contento. Cierto es que hay un alguna que otra variación, pero más en la forma que en el fondo, y por tanto sin mucha trascendencia. Quien no conocía la historia de Steve Rogers, puede hacerse una idea bastante fiel con la película.

Me gustó lo bien conseguida que estaba la ambientación de los años 40, la aparición del padre de Toni Stark (Iron Man), y me sorprendieron gratamente Chris Evans y el uniforme del Capi. Después de vistas algunas imágenes previas al estreno no tenía muchas esperanzas puestas en ello, más bien al contrario, pero al final acabó por llenarme. En cuanto a Hugo Weaving -en el papel de Cráneo Rojo- simplemente genial. Creo que definitivamente le quedan mucho mejor los papeles de malo, como aquí o como Agente Smith en "Matrix", que los de bueno (Elrond en "El Señor de los Anillos").

En conjunto buena peli, sin ser una maravilla, pero entretenida. Aunque seguramente la disfruten más quienes eran ya seguidores del Capitán América. Ya me contaréis si la habéis visto.

"Los superhéroes y la filosofía"

A veces no hay nada como un ejemplo sencillo, o más bien cercano, para conseguir que alguien entienda una explicación. Creo recordar que circulaba por ahí un e-mail que explicaba el funcionamiento de la economía, del estado y los impuestos, utilizando simplemente vacas y agricultores. La verdad es que era bastante curioso, e incluso útil. Así que es posible que mezclar vacas con tipos de interés y agricultores con especulación funcione. Pero no ha sido el caso -al menos para mí- de “Los superhéroes y la filosofía”, libro escrito por varios autores conocedores del mundo del cómic, y que terminé hace un par de semanas.

No sé si es que los autores sabían demasiado de comics y no tanto de filosofía, o al revés, o que no han sabido bien cómo explicar las teorías que querían, o más bien que no han logrado unir ambas cosas de forma coherente. No sé. El caso es que en general ni me ha servido para profundizar en determinadas cuestiones vitales -como supuestamente debería hacer la filosofía- ni me ha entretenido ni hecho pasar un buen rato -como suelen conseguir los comics-.

Obviamente, y aunque en conjunto no me ha gustado, alguna idea sí que me ha llamado la atención y me ha parecido aprovechable, como por ejemplo la explicación de por qué Superman, aun pudiendo pasar de nosotros, decide dedicarse a salvar a la humanidad, y cómo esto se une con las necesidad básicas de la pirámide de Maslow. Y sobre todo los tres tipos de amistad que plantea Aristóteles, y que yo hasta ahora desconocía: Amistad de placer, Amistad de utilidad y Amistad pura, y cómo estas pueden verse reflejadas en las historias de muchos comics, así como en la vida real.

En definitiva, que de todo se aprende y de todo se puede sacar algo bueno, y más aun de la lectura y los libros, pero aun así este no lo voy a recomendar, y menos para el veranito.

24 symbols

El Spotify de los libros. Así lo han catalogado la mayoría de los medios de comunicación que antes o después han tratado la noticia. Y vale que la iniciativa no parte de Suecia, como la exitosa aplicación de música, sino directamente de España, pero la verdad es que la definición parece bastante apropiada. Y es que 24symbols permite la lectura de libros electrónicos en modo streaming, es decir, sin necesidad de descargarlos. Al igual que Spotify, dispone de una modalidad completamente gratuita para la que de momento no es necesario disponer de invitación, y otra de pago. Esta versión "premium" ofrece dos ventajas básicas: poder leer los libros sin necesidad de conexión a Internet y eliminar la publicidad (que por lo que he probado no parece ser muy molesta en la versión gratuita).



Hasta ahora 24symbols solo permitía la lectura de los e-books desde su página web, pero recientemente han lanzado ya la aplicación para iPad, que podéis descargar desde aquí, y que creo que supone un salto cualitativo muy importante para la proyecto porque termina así de combinar el creciente hábito de lectura de e-books y el tan de moda almacenamiento en la nube. Hay que decir que la app, que permite marcar libros como favoritos, organizarlos por carpetas y compartir con "amigos" los que más nos gusten, tiene también todavía bastantes cosas que pulir (buscador, rotación del tablet, etc.) y que el catálogo de libros aún no es todo lo extenso que debería, pero la idea parece prometedora, y cuanto menos servirá para acercar la lectura un poco más a la gente y a las nuevas tecnologías.

Yo de momento ya me he marcado un par de libros como favoritos: "Alesia" de Luis de los Llanos y "El legado" de Blanca Miosi. Ya veremos cómo es la experiencia.

"Lagrimas en la lluvia" de Rosa Montero

Vuelta al blog después de la operación láser de miopía. Ya tenía ganas de empezar de nuevo escribir y a leer. Me he dado cuenta de que la vida puede ser enórmemente aburrida si nos quitan aquellos hobbys que más nos gustan. La última entrada que escribí rememora la escena final de Blade Runner, un icono de la ciencia-ficción, que nos hace reflexionar acerca de la esencia de la vida y de los seres humanos, y sobre la posibilidad del desarrollo futuro de androides o replicantes que se acerquen a esa esencia humana. La última novela que leí antes de la operacion fue "Lagrimas en la lluvia" de la española Rosa Montero y que toma como punto de partida una idea y un escenario similar al de la película de Ridley Scott: los avances tecnlógicos han permitido que la humanidad desarrolle una raza de tecnohumanos, con el objetivo de servir en tareas difíciles: guerras, minería, etc.; con el paso del tiempo estos replicantes van desarrollando más conciencia de sí mismos, pidiendo más derechos, y finalmente obligando a los humanos a aceptar la convivencia con ellos.

Dentro de todo este contexto, una detective replicante -Bruna Husky- se ve envuelta en una serie de asesinatos en serie cuyas víctimas son siempre tecnohumanos. La detective tendrá que resolver dichos casos y desentrañar la conspiración política que parece haber detrás de todos ellos. Es decir, que el libro se trata de una novela de ciencia-ficción con una trama de thriller policíaco.

Bien es cierto que la idea de los tecnohumanos no es del todo original, y que ya ha sido utilizada muchas veces por los grandes del género como Philip K. Dick o Asimov, pero la escritora madrileña consigue describir muy bien ese nuevo escenario de dentro de 100 años, haciéndolo totalmente creíble y logrando que te metas perfectamente en la historia. Esto combinado con una trama de asesinatos tipo novela negra, hace que en conjunto el libro se haga muy entretenido, incluso para los no iniciados en el mundo de la ciencia-ficción. Bastante recomendable. Y ahora ya lo dejo aquí, que se me empieza a cansar mucho la vista. Nos "vemos" ;-)

Todos esos momentos se perderán...

"Yo... he visto cosas que vosotros no creeríais... atacar naves en llamas más allá de Orión... he visto rayos C billar en la oscuridad cerca de la puerta de Tannhauser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo... como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir."

-Roy Batty, replicante-

Sobrecogedora y filosófica escena final del gran mito de la ciencia-ficción cinematográfica "Blade Runner". Me he acordado de ella al pensar en el último libro que acabo de terminar y me apetecía recogerla aquí. Incluso he buscado el vídeo por si queréis recordarlo:

http://www.youtube.com/watch?v=FOq7Ak5HkLs

Los últimos ochomiles (Pablo Díaz-Munío)

Hasta ahora, seguramente por ignorancia, o quizá por ciertos prejuicios, nunca había valorado como se merece la extrema dificultad del alpinismo. Y, a pesar de que me gusta el deporte en general, nunca le había prestado la suficiente atención. Las noticias que oía sobre si una determinada expedición había conseguido establecer el Campo 2, o sobre si habían llegado con éxito a la cima o no, me eran poco menos que indiferentes.

Tuvo que venir mi abuela a prestarme el libro "Los últimos ochomiles" para que me diese cuenta de mi error. El libro está escrito, por Pablo Díaz-Munío quien ejerció como médico en la expedición que llevó a Edurne Pasaban a completar los dos últimos ochomiles que le quedaban pendientes: el Shisha Pangma y el Annapurna, con 8.046 y 8.091 metros respectivamente, y narra, más o menos a modo de diario, las aventuras que vivió la expedición durante estas dos ascensiones, así como su encuentro con la rival de Pasaban, la coreana Miss Oh.

La expedición de Pasaban y Díaz-Munío hacia el Campo 2 del Annapurna

Además de estar escrito de forma muy amena, consigue también transmitir muy bien las sensaciones de encontrarse en alta montaña, de los peligros que entraña y el sentido común que hay que aplicar para evitarlos, los esfuerzos que exige en todo momento y la necesidad de compañerismo y trabajo en equipo. Valores, algunos de ellos, que podemos aplicar a nuestro día a día y que nunca viene mal recordar por ejemplo mediante libros como este. Además, si esto no fuera suficiente, en el transcurso de la narración Díaz-Munío añade unos cuantos datos científico-médicos muy interesantes y fáciles de entender, que resultan muy curiosos.

El libro es cortito (en parte es una pena porque invita a continuar leyendo) y, como os digo, muy entretenido, así que puede resultar una lectura perfecta para estos días de verano. Si además de esto conseguís, como me ha pasado a mí, aprender más sobre este deporte y sobre todo a saber valorarlo como se merece, poco más se puede pedir.

Franklin D. Roosevelt y la 22ª Enmienda

Este pasado Lunes 4 de Julio tuvimos fiesta en Vizcaya. Fue el día de San Valentín de Berriotxoa, que si no me equivoco es el segundo patrón de la provincia, y fue declarado festivo por caer San Ignacio (31 de Julio) en Domingo. En EEUU también fue festivo, aunque el motivo es bien diferente ya que en este caso se conmemora el día en que el país declaró su independencia del Imperio británico. 235 años han pasado ya desde que aquel 4 de Julio de 1776, Thomas Jefferson, John Adams, Benjamin Franklin y compañía firmaran en Philadelphia la famosa Declaración de Independencia.

Declaración de Independencia de EEUU

Desde entonces, o más bien desde el final de la guerra y la posterior aprobación de la Constitución, han sido 43 los presidentes que ha tenido el país. Ya el primero de ellos, George Washington -elegido en 1789- limitó voluntariamente su mandato a tan solo 8 años, unos dicen que por su avanzada edad y otros que con el objetivo de que el país no se convirtiera de facto en una monarquía. Su inmediato sucesor, John Adams, no tuvo oportunidad de imitarle ya que perdió sus segundas elecciones, pero los siguientes: Jeffeson, Madison y Monroe, sí tomaron ejemplo de Washington y acotaron también su presidencia a dos mandatos, estableciendo así una costumbre no escrita de sana regeneración democrática.

Bien por convicción personal, o por perder las elecciones, o bien por fallecimiento en el cargo o ser víctima de un asesinato, no fue hasta mediados de siglo XX que un presidente de EEUU superó los 8 años de gobierno. Quien rompió finalmente la regla -o más bien costumbre- fue el demócrata Franklin Delano Roosevelt, 32º presidente, y que tuvo la ardua tarea de dirigir el país durante la II Guerra Mundial. Esta complicada situación internacional hizo que Roosevelt, a pesar de haber completado ya dos mandatos, se presentara en 1940 a una nueva reelección de la que salió victorioso, dicen que gracias a su buen hacer en el gobierno sobre todo en política social. Durante esta tercera legislatura tuvo que enfrentarse a los ataques japoneses de Pearl Harbor y tomar la decisión de enviar tropas a Europa para entrar definitivamente en la guerra, situaciones enormemente delicadas pero que no le impidieron optar y acceder ya por cuarta vez a la presidencia en las elecciones de 1944, convirtiéndose en el único presidente de EEUU que ha gobernado durante 4 mandatos. Este último duraría solo un año ya que en 1945 Franklin D. Roosevelt falleció de una hemorragia cerebral, consecuencia del cáncer que sufría, completando en total 12 años de presidencia, y dejando como sucesor a Harry Truman, bajo cuyo gobierno se realizó el ataque nuclear a Hiroshima y Nagasaki.

Franklin D. Roosevetl junto a Churchill y Stalin en la Conferencia de Yalta

En 1947, casi tres años después de la cuarta reelección de F.D.Roosevelt, el Congreso de los EEUU aprobó la Vigesimosegunda Enmienda a su Constitución, la cual establecía que ninguna persona podría ser reelegida para el cargo de Presidente más de dos veces, convirtiendo así en ley escrita lo que Washington y Jefferson habían intentado establecer como tradición casi dos siglos antes.

Band of Horses

Creo que con este post me estreno en la categoría de música; y es raro porque al fín y al cabo es también una de mis aficiones. Algo más oculta últimamente, pero que sin duda se iba mereciendo ya una entrada después de más de dos años de blog. Toca ahora porque estoy bastante enganchado a los estadounidenses Band of Horses, y porque así hago un homenaje a un fiel seguidor del blog. Así que aquí os dejo un par de videos de la banda de Seattle. Los vídeos en sí no es que sean una maravilla, pero es la forma más fácil que tengo de colgar las canciones, así que si queréis podéis seguir navegando por ahí mientras los escucháis de fondo. Espero que os guste:

Band of Horses - Is there a ghost




Band of Horses - The Funeral:

100 Balas

Tenía pendiente escribir esta entrada ya desde hace unos días. Me estaba dando un poco de pereza. Y creo que es porque al final, o más bien "el final", no acabó de gustarme del todo. Me di verdadera cuenta el viernes, en plena comida con un grupo de amigos. A veces las comidas sirven para algo más que para comer y beber. A veces determinadas preguntas en determinados momentos, o hechas por determinada gente, te hacen ver las cosas desde otro lado o pensarlas con otro enfoque. Mi ejemplo es una chorrada, pero es un ejemplo. Y por tanto también pasa con las cosas importantes.


Bueno, el caso es que "100 Balas" me ha acabado decepcionando un poco. Quizá haya sido porque al principio me enganché mucho y al final la sensación que me queda es que ha ido de más a menos. O quizá que la trama se me ha hecho un poco complicada. No sé. No importa. Y de toda formas quiero ser positivo, así que como ya he dicho las cosas malas, ahora voy a decir las buenas.

Lo primero y más importante es que la idea es tremendamente original, y para el que no se acuerde la repito: un misterioso desconocido se va presentando ante diferentes personajes, ofreciéndoles un maletín con un arma, 100 balas irrastreables y pruebas inequívocas de que alguien les arruinó la vida en el pasado. A partir de ahí estos personajes deberán decidir si se vengan o no de quien entonces les traicionó. A pesar de que al principio las historias parecen totalmente inconexas, a medida que avanzas en los números todas se van entrelazando y dando forma a una trama principal con cierto toque "tarantinesco". Humor negro, sexo, misterio y mucha crueldad en algunas viñetas completan los ingredientes.

Ahora que lo pienso... creo que al final sí me ha gustado. No sé. Será que escribir también me hace ver o pensar las cosas desde otro punto de vista. En cualquier caso os recomiendo que lo leáis. Merece la pena. Y ya me contaréis si os ha parecido bueno, o regular, u original, o decepcionante... o todo a la vez...

La Commonwealth y otros territorios británicos

Para completar la entrada anterior sobre el Reino Unido y para contestar a la pregunta que “Flower of Scotland” lanzó en los comentarios, dejo una pequeña reseña sobre cómo podría entenderse la Commonwealth y la relación de los británicos con otros territorios vinculados a ellos. No voy a profundizar mucho porque el tema es de por sí bastante ambiguo y se puede hacer muy plomizo.

La Commonwealth -o Mancomunidad de Naciones- británica se trata de una asociación de países que históricamente han estado relacionados de una forma u otra con el Reino Unido, siendo este un miembro más de la misma. A pesar de que estos países son completamente independientes de los británicos, algunos de ellos están constituidos como Monarquías parlamentarias (por ejemplo Australia, Nueva Zelanda o Canadá) y es la Reina Isabel II la que ejerce de monarca y mantiene la condición de jefe de estado (aunque solo de forma representativa y no participa en decisiones). Por el contrario, el resto de países que conforman la Commonwealth y que no son monarquías parlamentarias (por ejemplo la India, Kenia o Malasia), no tienen en cuenta para nada la figura de la Reina. El total de la Commonwealth son 54 estados de los cuales 16 son monarquías parlamentarias.

Mapa de los Estados de la Commonwealth

Los casos de Gibraltar o las Islas Bermudas por ejemplo, son diferentes a los citados antes. Estos no pertenecen a la Commonwealth sino que se consideran Territorios Británicos de Ultramar pertenecientes al Reino Unido. Se podría decir que son propiedad de los británicos pero no conforman lo que oficialmente se conoce como Reino Unido. Tienen su propio gobierno y la figura de un Gobernador que representa a la Reina, y dependiendo del caso gozan de un amplio grado de independencia.

Por último estarían la Isla de Man y las Islas del Canal de la Mancha (el Bailiazgo de Jersey y el Bailiazgo de Guernsey), cuyo status es el de Dependencia de la Corona Británica. Tampoco forman parte del Reino Unido pero este se encarga de todos los asuntos concernientes a política exterior (defensa y representación), dejando la mayor parte de la política interior al parlamento autónomo de cada territorio. No disponen de tanta autonomía como los anteriormente citados Territorios de Ultramar ya que el Reino Unido puede legislar sobre determinados asuntos incluso en contra de la voluntad de los territorios.




PD: Se trata de una explicación ligera y superficial de las diferentes relaciones que unen a algunos países con el R.U. Dentro de ellas existen matices y muchos datos históricos por lo que a quien le guste puede disfrutar profundizando en ello.

PD futbolera: Matthew Le Tissier, el extraordinario exfutbolista del Souththampton, es originario del Bailiazgo de Guernsey.

La formación del "Reino Unido"

La conformación de los distintos países a lo largo de la Historia puede albergar casi todas las variantes diferentes que nos podamos imaginar: invasiones, independencias, desmembramientos, acuerdos pacíficos (o no tan pacíficos) de unión, nuevas fundaciones, etc. Sin embargo, pocos procesos serán tan curiosos como el del actual Reino Unido, que todavía hoy suscita dudas en la cultura popular en cuanto a su condición de estado/nación/país, o las regiones que lo integran.

A pesar de que el dominio inglés sobre Gales venía de tiempo atrás, puede considerarse que no fue hasta 1536 -año en que Enrique VIII impuso finalmente las leyes inglesas mediante el Acta de Unión- cuando Inglaterra y Gales se unieron definitivamente y se dio el primer paso a la conformación del actual estado que, de vez en cuando y por comodidad, algunos todavía hoy continuamos denominando simplemente "Inglaterra".

En 1603, a la muerte sin descendencia de Isabel I de Inglaterra -última de la dinastía Tudor- es Jacobo VI de Escocia -hijo de María Estuardo- el que hereda el trono inglés produciéndose así la conocida como Unión de las Coronas por recaer en Jacobo los tronos tanto de Inglaterra como de Escocia. A pesar de ello, esta unión solo estaba representada por el rey, y ambos reinos continuaron oficialmente separados más de un siglo hasta que en 1707 -durante el reinado de Ana I, última de la dinastía Estuardo- la unión se hizo oficial mediante un nuevo Acta de Unión y ambos países pasaron a formar el "Reino de Gran Bretaña".

Casi tuvieron que transcurrir otros cien años para que el siguiente miembro pasara a formar parte de la unión, y es que fue en 1800 cuando Irlanda -ratificando también un Acta de Unión- paso a formar junto con Inglaterra y Escocia el entonces conocido como "Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda". A partir de entonces el nuevo estado vivió un largo periodo de progreso, con un mayor desarrollo del sistema parlamentario y el liderazgo de la Revolución Industrial.

El siguiente hito para la conformación final del reino nos lleva a 1919 y al estallido de la Guerra de Independencia de Irlanda. Esta finalizaría después de dos años con la partición de la isla: creándose en el sur el Estado Libre Irlandés -posteriormente convertido en República- y manteniéndose Irlanda del Norte (aprox. 1/6 de la isla) como parte del Reino Unido, que esperaría hasta 1927 para cambiar definitivamente su nombre y pasar a denominarse ya como se le conoce hoy en día de forma oficial: "Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte".

Como curiosidad, la sistemática evolución de la conformación del Reino Unido puede verse reflejada en la propia evolución de su famosa bandera, conocida como "Union Flag" o "Union Jack".

Mens sana...

Llevo ya un par de semanas sintiéndome algo alicaído, sin ganas de nada, ni leer, ni escribir en el blog, ni salir a dar una vuelta. Incluso un poco triste, no sé. Y además me encuentro como cansado, que me pesan las piernas, que me da pereza levantarme y hasta casi me da pereza sentarme -¡dios mio, cómo puede ser eso!-. Pero si es que además llevo un par de semanas sin hacer deporte, ¡cómo voy a estar cansado! Lo venía achacando últimamente a la primavera y a los cambios de tiempo, con todo este sol y estos calores que habitualmente me influyen mucho (aunque normalmente en sentido contrario, pero bueno...). Pero hoy, venciendo la pereza y terminando por fin el último libro de Punset, me he topado con otra posible explicación.

Y es que, corroborando lo que los antiguos griegos y romanos ya sabían, recientes investigaciones de la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA) han probado que el ejercicio físico fomenta el envío al cerebro de la proteína IGF1, la cual, mediante un sofisticado proceso, termina ayudando a la creación de nuevas conexiones entre neuronas y al desarrollo de un pensamiento más sofisticado, una mayor facilidad de aprendizaje, una mejora en la capacidad memorística y en resumen a una mejor salud mental -incluso algunos estudios apuntan a una posible mejora en la protección frente al Alzheimer- ¿Será esta reciente carencia de ejercicio y deporte la causante de mi desgana? Pues en más que probable que tenga buena parte de la culpa.


Sabíamos ya que por ejemplo nuestros genes y nuestra dieta podían determinar nuestra salud física y mental, e intuíamos que el ejercicio físico nos hacía sentir mejor, y ahora lo vemos confirmado. Con todo ello, lo cierto es que la ciencia nos ayuda, además de a comprender la naturaleza y el universo en que vivimos, a conocer aquello que nos estimula por dentro, el porqué de nuestros comportamientos, el porqué de nuestras emociones y sentimientos, incluso el porqué de nuestra salud, y en definitiva el porqué de nuestra felicidad.

¿Qué nos hace humanos?

Hace pocos días leí la noticia de que se había publicado la adaptación en cómic de la novela "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?" de Philip K. Dick. El dibujo del cómic parecía de lo más atractivo, a la vista del par de imágenes que colgaron junto a la noticia, pero sin duda, lo más interesante de la adaptación será ver cómo consigue reproducir las profundas ideas que el autor estadounidense plasmó en la novela, y que ya fueron llevadas con éxito al cine gracias a la película Blade Runner.

Dirigida por Ridley Scott y considerada un película de culto y una referencia básica para los amantes de la ciencia-ficción, Blade Runner está basada también en la misma novela de Dick, y a pesar de que la adaptación no fue todo lo fiel que algunos querían, ambas comparten una interesante idea y ambas dan pie a una reflexión profunda acerca de la naturaleza humana: ¿qué es lo que nos diferencia de las máquinas o las computadoras? ¿pueden éstas sufrir y sentir como nosotros? y en definitiva ¿qué es lo que realmente nos hace humanos?

Al principio la respuesta parece fácil, incluso obvia: nosotros estamos hechos de carne y hueso y en cambio las máquinas o androides son de metal u otros materiales artificiales; o bien que nosotros podemos pensar y ellos no. ¿Pero es tan sencillo? Los imparables avances científico-tecnológicos son capaces de simular, cada vez con más precisión, la estructura y el material corporal humanos, y no nos encontramos lejos de replicar artificialmente la regeneración celular. En cuanto al pensamiento, la inteligencia artificial avanza a pasos agigantados; los ordenadores cada vez tienen una mayor capacidad de procesamiento y empiezan a ser capaces de aprender de sus decisiones anteriores y a modelar sus respuestas futuras en función de su experiencia acumulada. Parece por tanto que estas cuestiones no nos diferencian tanto como humanos -o al menos dejarán de hacerlo pronto-.

Otras características que creíamos que nos hacían humanos, y que nos diferenciaban por ejemplo de otros animales, eran nuestra capacidad de fabricar y utilizar herramientas -característica que han echado por tierra ya los chimpancés al demostrarse también capaces de ello- nuestra capacidad de tomar decisiones basadas en la razón -aunque ahora ya sabemos que la mayoría de nuestras decisiones las tomamos basándonos en el subconsciente- o el tamaño de nuestro cerebro -se sabe ya que tampoco es determinante; los Neandertales lo tenían más grande y sin embargo no estaba bien aprovechado-.

Algunos estudios científicos recientes apuntan a la empatía como particularidad diferencial en los seres humanos. Nuestra capacidad de entender los sentimientos del prójimo, ponernos en su lugar y compartir sus emociones. Y bien es cierto que parece difícil creer que esta cualidad pueda ser imitada por los futuros androides o "replicantes" que anden entre nosotros dentro de unos cuantos años. En su último libro "Excusas para no pensar", Eduardo Punset comenta que la clave para el desarrollo de esta empatía fue nuestra capacidad para cocinar. Esto nos ayudó a conservar la comida, hacernos sedentarios, y en último término a desarrollar un sentimiento de respeto hacia la comida -y las pertenencias- de los demás, lo cual constituyó la raíz de nuestra empatía y por tanto nuestra singularidad humana.

Ciertos o no, la verdad es que todos estos estudios y teorías parecen a veces sacados de la ciencia-ficción (y no al revés), y en ocasiones cuesta creerlos o comprenderlos. En cualquier caso lo que sí son, sin duda, es un buen motivo para la reflexión. ¿Qué es lo que verdaderamente nos hace humanos? ¿Es posible que el límite entre lo humano y lo artificial sea cada vez más difuso? ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?

Filipo II de Macedonia

Detrás de los grandes hombres de la Historia hay en muchas ocasiones personajes que quedan en un segundo plano, relegados a un protagonismo claramente menor, pero sin cuya intervención los primeros quizá no hubiesen logrado sus objetivos. Personajes importantes en la Historia puede haber cientos, o miles, pero tan grandes y fascinantes como Alejandro Magno muy pocos. Sin embargo, para ser justos, él también debe buena parte de sus éxitos a un protagonista que la cultura popular ha acabado por dejar oculto en la sombra de la gran figura del más famoso de los macedonios. Se trata de Filipo II de Macedonia, quien como algunos sabréis, fue el padre de Alejandro Magno. Y no me refiero a que Filipo engendrase al gran Alejandro III y por tanto este le debiera la vida, sino que existen razones políticas y estratégicas.

Filipo fue el tercer hijo varón de Amintas III, entonces rey de Macedonia, por lo que al tener dos hermanos mayores su destino no parecía en principio estar encaminado a gobernar. Sin embargo, ya desde muy joven mostró grandes capacidades de liderazgo, valentía e inteligencia; cualidades que hacían apuntar a un futuro grande. Su educación estuvo influida por un lado por Nicómaco, médico y consejero de su padre, y sobre todo por su relación de amistad con Aristóteles, hijo de Nicómaco y posterior mentor de Alejandro Magno. Aunque probablemente el aprendizaje que más le influyó y que más aprovechó a posteriori fue el que recibió en Tebas, cuando a los 14 años fue enviado allí para permanecer como rehén durante 3 años.

Tebas era entonces la principal potencia militar del mundo griego, y allí Filipo aprendió grandes tácticas de guerra entre las que destacaría el fortalecimiento y la mayor importancia de la infantería sobre las entonces predominantes tácticas de caballería. Llegado el momento en que comenzó a dirigir ejércitos macedonios, y basándose en las tácticas tebanas, Filipo creó la Falange macedonia: robustas y eficaces formaciones de infantería, en las que él mismo participaría en las batallas demostrando su valentía, y que posteriormente fueron empleadas por su hijo Alejandro y más tarde los romanos transformarían en las famosas legiones romanas.

Falange Macedonia (imagen de Johnny Shumate)

Muertos sus hermanos Alejandro II y Pérdicas III, Filipo quedó primero como regente del hijo de este último y posteriormente fue elegido oficialmente como rey de Macedonia. El país, y el mundo griego en general, pasaba entonces por una época muy convulsa, con guerras internas, cambios de monarcas y amenazas externas. Filipo logró hacer frente a todas esas adversidades y a base de importantes acciones bélicas y diplomáticas, consiguió estabilizar la región, situar a Macedonia como potencia hegemónica y ampliar sus dominios. En definitiva, Filipo II sentó las bases del futuro Imperio Macedonio y con sus hazañas allanó el camino para que su hijo Alejandro acabara conquistando medio mundo y pudiese pasar a la Historia como el gran Alejandro Magno.

Filipo II antes de la Batalla de Queronea (la primera en la que participaría Alejandro)

Un punto azul pálido

Un poco más de ciencia. O de filosofía. O más bien de filosofía derivada de la ciencia. A raíz de comentar en una entrada el libro de Carl Sagan "El Mundo y sus Demonios", mi compañera Esti me hizo llegar un texto del científico estadounidense que hace de sinopsis, o que resume otro de sus libros titulado "Un punto azul pálido".

El libro está basado en una fotografía que (parece ser que a petición del propio Sagan) la nave espacial Voyager 1 sacó a la Tierra desde 6.000 millones de kilómetros de distancia, donde puede verse a nuestro planeta como un minúsculo punto azul prácticamente insignificante en la inmensidad del universo.

Fotografía "Pale Blue Dot" tomada por la Voyager 1 - NASA

Esta circunstancia es aprovechada por Sagan como punto de partida para plasmar una perspectiva sobre el lugar del ser humano en el universo y por ende sobre la relevancia de nuestros comportamientos, ideologías y costumbres. Como ya me preguntaba en el post sobre Aristarco de Samos y el helicentrismo, ¿realmente somos tan importantes? Puede que la respuesta sea simplemente sí. O puede que sea no. Es prácticamente el misterio de la vida, y seguramente esta se nos acabe sin conocer la solución, pero al menos todos haríamos bien en planteárnoslo.

Os dejo el texto al que hacía referencia al principio:

"Mira ese punto. Eso es aquí. Eso es casa. Eso es nosotros. En él se encuentra todo aquel que amas, todo aquel que conoces, todo aquel del que has oído hablar, cada ser humano que existió, vivió sus vidas. La suma de nuestra alegría y sufrimiento, miles de confiadas religiones, ideologías y doctrinas económicas, cada cazador y recolector, cada héroe y cobarde, cada creador y destructor de la civilización, cada rey y cada campesino, cada joven pareja enamorada, cada madre y padre, cada esperanzado niño, inventor y explorador, cada maestro de moral, cada político corrupto, cada “superestrella”, cada “líder supremo”, cada santo y pecador en la historia de nuestra especie vivió ahí – en una mota de polvo suspendida en un rayo de luz del sol.
La Tierra es un muy pequeño escenario en una vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre vertida por todos esos generales y emperadores, para que, en gloria y triunfo, pudieran convertirse en amos momentáneos de una fracción de un punto. Piensa en las interminables crueldades visitadas por los habitantes de una esquina de ese pixel para los apenas distinguibles habitantes de alguna otra esquina; lo frecuente de sus incomprensiones, lo ávidos de matarse unos a otros, lo ferviente de su odio. Nuestras posturas, nuestra imaginada auto-importancia, la ilusión de que tenemos una posición privilegiada en el Universo, son desafiadas por este punto de luz pálida.
Nuestro planeta es una mota solitaria de luz en la gran envolvente oscuridad cósmica. En nuestra oscuridad, en toda esta vastedad, no hay ni un indicio de que la ayuda llegará desde algún otro lugar para salvarnos de nosotros mismos.
La Tierra es el único mundo conocido hasta ahora que alberga vida. No hay ningún otro lugar, al menos en el futuro próximo, al cual nuestra especie pudiera migrar. Visitar, sí. Colonizar, aún no. Nos guste o no, en este momento la Tierra es donde tenemos que quedarnos.
Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad y construcción de carácter. Quizá no hay mejor demostración de la tontería de los prejuicios humanos que esta imagen distante de nuestro minúsculo mundo. Para mí, subraya nuestra responsabilidad de tratarnos los unos a los otros más amablemente, y de preservar el pálido punto azul, el único hogar que jamás hemos conocido."